jueves, 24 de abril de 2014

Querida

Entro a la alcoba
y en tu mirada me sumerjo
esa de cañas dulces
y fresco aroma.

Entonces suspiro
tu presencia me colma
me desnuda, me hace preso
dulce y triste.

Este cuerpo errante
¿Tanto poder te ha dado?
exotérico sería
si así lo hiciere.

Esclavo soy de nuevo
de una risa sifrina
unos gráciles dedos
y unos firmes pies.

Extenso tu cabello
de dama rimbombante
intensas tus ideas
convincentes por demás.

En mi soledad amarga
me mojo en tu recuerdo
no basta, Querida
no basta.

Enfermo estoy de mente
de corazón también
lo siento, Querida
lo siento.

Entretanto tu eres libre
yo sigo aquí
tirado en el sofá,
como dos duraznos.

Estimé pasión darte
pura y salpicante
de esas que no se ven
por estos días.

Etiquétame, Querida
de cursi enamorado
cierra tus ojos hoy
y ahí me verás mañana.


Entro a la alcoba
y ya no estas ahí
eres el pasado,
un suspiro de fresco aroma.

2 comentarios:

  1. Si no me equivoco y tal vez lo haga pero bueno, creo que este fue uno de los primeros poemas que te escuché recitar en un jueves cultural, volverlo a leer me trae buenos recurdos :)

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  2. No amiga, este nunca lo he recitado ni publicado antes, es totalmente nuevo.

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